6 de noviembre, 2013 (romereports.com) Los asistentes a la audiencia general no se esperaban que el Papa Francisco les pidiera un favor al final de su discurso.
Francisco
“Y ahora me permitiréis pediros un acto de caridad. Estad tranquilos, que no se hará la colecta”.
El Papa explicó que antes de la audiencia visitó a Noemí, una niña de año y medio de edad que sufre una enfermedad grave.
Hoy explicó que el amor entre cristianos se llama “comunión de los santos” y por eso pidió a toda la plaza rezar por ella durante unos instantes.
Francisco
“Nosotros no la conocemos pero es una niña bautizada, una de nosotros, es una cristiana. Hagamos un acto de amor por ella, primero en silencio pidamos al Señor que la ayude en este momento y le dé la salud. En silencio un momento y luego rezaremos el Ave María”.
En su catequesis explicó que la comunión de los santos se apoya en los sacramentos. A través de ellos el cristiano encuentra a Dios, que le impulsa a vivir más preocupado de los demás hombres y a no dejarse llevar por falsos ídolos.
Por eso dijo que es importante comulgar, que se bautice pronto a los niños y que reciban la confirmación. Especialmente se detuvo en el sacramento de la confesión.
Francisco
“Es importante que cuando nos sintamos pecadores acudamos al sacramento de la reconciliación. 'Oh, padre, tengo miedo porque el cura me va a regañar'. No, no te va a regañar el cura. ¿Sabes qué encontrarás en el sacramento de la reconciliación? A Jesús, a Jesús que te perdona. Es Jesús quien te espera allí. Y esto es un sacramento y esto hace crecer a toda la Iglesia”.
Con la oración por la pequeña Noemí, Francisco mostró cómo debe ser el amor entre los cristianos. Dijo que no debe ser artificial y que debe adentrarse en el sufrimiento de los demás. Añadió que así crecerá la Iglesia como en los primeros tiempos del cristianismo en el que los paganos se sorprendían del amor que había entre los creyentes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario