27 de noviembre, 2013 (romereports.com) El Papa no ha resistido al frío viento que azotaba la plaza de San Pedro y se ha puesto un abrigo y una bufanda de color blanco durante la audiencia general. Este miércoles continuó su ciclo de catequesis sobre el Credo y habló con intensidad sobre el sentido de la muerte y del sufrimiento.
Francisco
“Entre nosotros, comúnmente, hay un modo equivocado de mirar a la muerte. La muerte nos toca a todos, y nos interroga de un modo profundo, especialmente cuando nos toca de cerca o cuando toca a los niños, a los indefensos, de un modo que nos parece escandaloso”.
El Papa explicó que cuando la muerte se considera como el final de todo, se transforma en una amenaza ante la que se reacciona con miedo.
Francisco
“Si nos dejamos llevar por esta visión equivocada de la muerte, no tenemos más opción que ocultarla, negarla o banalizarla para que no nos dé miedo”.
Por eso, el Papa dijo que quienes viven pensando en los demás, no temen a la muerte porque el bien realizado y el bien recibido no han sido inútiles. Y para subrayar esta idea la repitió con los peregrinos.
Francisco
“Quien practica la misericordia no teme a la muerte. ¿Estáis de acuerdo? Pues vamos a repetirlo juntos: ¡Quien practica la misericordia no teme a la muerte!”
A pesar de las bajas temperaturas la audiencia general se celebró en la plaza de San Pedro en lugar del Aula Pablo VI, como suele ser habitual en estas fechas.
"Te quiero mucho".
El principal motivo es que el gran salón de audiencias tiene capacidad sólo para 7 mil personas. Y que hoy habían solicitado invitaciones nada menos que 50.000 peregrinos.
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