04-02-2014
En su homilía en Casa Santa Marta, el Papa Francisco dijo que Dios es un padre que llora por sus hijos pero nunca reniega de ellos, ni si quiera de los más rebeldes.
Francisco recordó las historias dos padres que perdieron a sus hijos: El rey David que perdió a Absalón, y Jairo, el jefe de la sinagoga que perdió a su hija.
Francisco
"Y con estas dos imágenes digamos: ‘Creo en Dios Padre…’. Y pidamos al Espíritu Santo, porque sólo Él puede, el Espíritu Santo, que nos enseñe a decir:‘¡Abba!, ¡Padre!’. ¡Es una gracia! Poder decir a Dios ‘¡Padre!’ con el corazón. Es una gracia del Espíritu Santo. ¡Pedídsela a Él!”.
El Papa explicó que Dios es como el padre de la parábola del hijo pródigo que espera al hijo que ha gastado toda la herencia. Francisco dijo que ese es el tipo de paternidad espiritual que deben tener también los sacerdotes y obispos.
Extracto de la Homilía del Papa
(Fuente: Radio Vaticana)