El Arzobispo Metropolitano de Huancayo, Monseñor Pedro Barreto Jimeno, SJ., dijo que el año 2013 se presenta como un reto y un desafío
muy grande para la sociedad, las autoridades y la Iglesia Católica.
En un mensaje al inicio de un nuevo año dijo que las
dificultades que se dan en nuestro entorno son muy graves y uno de ellos,
reconocido por muchos, es la alta corrupción. Monseñor Barreto manifestó que
cuando hay corrupción hay injusticia, cuando hay injusticia hay desorden,
cuando hay desorden hay violencia, y cuando hay violencia hay delincuencia, que
afectan gravemente a la familia. “Es en este tema que tenemos que cerrar filas
para hacer juntos de la región central, una región digna para vivir en paz y
justicia. Las autoridades deben tener claro, tenemos que buscar al bien entre
todos”, dijo.
Agregó que como Iglesia Católica tenemos que trabajar
fuertemente para que el Evangelio de Jesucristo no solamente sea escuchado sino
puesto en práctica en todos los niveles, especialmente en la familia, el
trabajo, la sociedad, la economía, la política, los medios de comunicación y en
todo ambiente social.
Confió que en este nuevo año no haya tantos conflictos
socio-ambientales, como los de La Oroya, donde se han reanudado las operaciones
metalúrgicas; y también en Morococha donde continúa el proceso de
reasentamiento.
Por otro lado, este 1 de enero, Monseñor Pedro Barreto
celebró 11 años de ordenación sacerdotal. Con este motivo, recibió la gratitud
del pueblo que ve en él al Padre y Pastor de la Iglesia en Huancayo, que
comprende las provincias de Yauli, Jauja, Concepción, Chupaca y Huancayo.
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