3 de enero, 2013. (romereports.com) Han llegado a la última parada de su viaje, el aula Pablo VI del Vaticano, cansados, pero felices. Son decenas de jóvenes mexicanos, que además de estas banderas, han traído una canción familiar para Benedicto XVI.
“Benedicto, hermano, ya eres mexicano, Benedicto hermano, ya eres mexicano...”
Querían hacer sonreír al Papa y demostrarle, una vez más, el cariño que le tienen en México.
Franco Báez
“Le voy a decir a toda mi familia que estuve con el Papa y bueno yo ya había tenido la oportunidad de ver al Papa porque nos vino a visitar allí a León Guanajuato”.
Tienen entre 12 y 17 años y aunque se conozcan desde hace poco, tienen muchas cosas en común.
En su colegio, del Regnum Christi, les invitaron a participar en la peregrinación a Roma que organizan todos los años durante la Navidad. Se pusieron en marcha el día 26 de diciembre.
Ángel Calaz y Mauricio Mazatán
“Ahora yo me siento distinto siento que el Papa me bendijo y me siento muy feliz acogido por Dios. Esta es una oportunidad única que sólo se tiene una vez en la vida y que no toda la gente la puede tener. Nos sentimos muy afortunados”.
Ahora regresan a México, con nuevos amigos, y el recuerdo de todo lo que han vivido junto a la tumba de San Pedro.
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