Ciudad del
Vaticano (AICA): El papa Francisco envió hoy, 12
de octubre, un videomensaje en portugués al pueblo brasileño con motivo de
celebrarse el Tercer centenario del hallazgo de la imagen de Nuestra Señora de
Aparecida en el río Paraíba do Sul. El pontífice exhortó a los brasileños a que
no se dejen vencer por el desánimo “Tengan confianza en Dios, confíen en la
intercesión de Nuestra Madre Aparecida”, les dijo Francisco.
El Santo
Padre expresó que su saludo quiere ser “un abrazo fraternal” y recordó su
primer viaje apostólico al Brasil en 2013 durante el cual visitó el Santuario
de Nuestra Señora de Aparecida. Y al no poder estar presente en esta ocasión,
aunque reconoce que hubiera querido, ya que añadió: “La vida de un Papa no es
fácil”, en su representación nombró al cardenal Giovanni Battista Re como
delegado con derecho pontificio para “garantizar la presencia del Papa en medio
de ustedes, durante las celebraciones de la fiesta de Nuestra Señora de
Aparecida el 12 de octubre”.
Francisco los animó a llevar esta alegría sobre todo a “las periferias geográficas, sociales y existenciales, como gotas de esperanza”, ya que el cristiano “nunca puede ser pesimista”.
“Hoy
Brasil necesita hombres y mujeres que estén llenos de esperanza y firmes en la
fe, que sean testigos del hecho de que el amor es más fuerte que la oscuridad
del egoísmo y la corrupción”, concluyó el Papa.
Brasil
celebra la memoria de su Patrona
Las
celebraciones por los 300 años del hallazgo de la imagen de la Virgen de
Aparecida comenzaron en octubre de 2016 con el inicio del Año Jubilar bajo el
lema: “300 años de bendiciones”. Durante todo este tiempo -y especialmente
durante esta semana- el Santuario Nacional de Aparecida preparó una
programación devocional y litúrgica especial que contó con multitudes de fieles
que acudieron a visitar a la Madre del Brasil.
Ayer, miércoles 11 de octubre, se celebró una misa, en el Santuario, celebrada por varios arzobispos, obispos, misioneros redentoristas y fue presidida por el representante pontificio cardenal Giovanni Battista Re. Durante esta celebración eucarística se reflexionó sobre el tema “Bienaventurada Virgen María, Madre de la Consolación”.
El cardenal Re se refirió a la necesidad de que el cristiano recurra a Nuestra Señora Aparecida y pida por su intercesión “una fe sólida y fiel a Cristo”.
Ayer, miércoles 11 de octubre, se celebró una misa, en el Santuario, celebrada por varios arzobispos, obispos, misioneros redentoristas y fue presidida por el representante pontificio cardenal Giovanni Battista Re. Durante esta celebración eucarística se reflexionó sobre el tema “Bienaventurada Virgen María, Madre de la Consolación”.
El cardenal Re se refirió a la necesidad de que el cristiano recurra a Nuestra Señora Aparecida y pida por su intercesión “una fe sólida y fiel a Cristo”.
“En las
celebraciones de estos días, dijo el representante del papa Francisco, queremos
pedir a Nuestra Señora Aparecida, estrella de la evangelización, que nos ayude
a testimoniar y transmitir la fe. Un padre y una madre pueden dejar una pequeña
herencia a sus hijos, pero si ellos le transmiten una fe sólida, les estarán
dando el mayor patrimonio que puedan tener, ya que será para ellos fuerza,
apoyo, y consuelo durante toda su vida”, dijo el purpurado.
“Que Nuestra Señora Aparecida nos acompañe en las durezas de la vida y nos ayude a crecer en la fe, para salir vencedores en la lucha del bien y del mal que se traba en el mundo. Que Ella nos ayude a mantenernos en la fidelidad de las enseñanzas de su hijo y en nosotros nos fortalezca a poner en práctica, las palabras que Ella pronunció en Caná de Galilea: ¡hagan todo lo que el Señor les diga! ", concluyó el cardenal Re. +
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