LA PAZ, 27 Sep. 11 / 06:47 pm (ACI/EWTN Noticias)
Luego de los actos de represión por parte del gobierno de una marcha de indígenas el pasado 25 de septiembre, la Conferencia Episcopal de Bolivia rechazó la violencia utilizada por las fuerzas del orden y pidió a autoridades esclarecer los hechos.
En la marcha, que tuvo como resultado 7 heridos, un bebé muerto y 37 desaparecidos, los indígenas se desplazaban desde la Amazonia en rechazo a la construcción de una carretera entre los departamentos de Cochabamba y Beni que cruzaría el Parque Isiboro Sécure, principal reserva forestal que fue declarada su territorio en 1990.
En su declaración el Episcopado condenó "las acciones de intervención y represión al campamento de los hermanos marchistas, que según la información directa de nuestros agentes pastorales de la zona y las versiones que han proporcionado los medios de comunicación, ha ocurrido cuando ellos se encontraban en total situación de indefensión".
En el comunicado, firmado por Mons. Oscar Aparicio Obispo Auxiliar de La Paz y Secretario General de la Conferencia Episcopal Boliviana, los obispos pidieron a las autoridades responsables garantizar los derechos fundamentales de todas las personas.
"En nombre del Dios, Padre de todos y Señor de la Vida, exigimos a las autoridades nacionales renunciar al camino de la represión, la persecución y la violencia que no soluciona los problemas y demostrar, con acciones coherentes, el discurso de escucha y defensa de los derechos de los bolivianos, especialmente de las poblaciones más pobres y vulnerables", señalaron.
Finalmente los miembros del Episcopado consideraron que "un diálogo sincero” es el único camino que puede garantizar soluciones pacíficas y duraderas para el bien de todos.
"Convocamos nuevamente a todos los fieles a elevar oraciones por el restablecimiento de la paz y la plena vigencia de los derechos humanos en nuestro país".
Según información de la agencia Efe los policías atacaron con gases y porras el campamento de carpas de los indígenas cerca del pueblo de Yucumo, a más de 300 kilómetros de La Paz. El subcomandante de la Policía, General Oscar Muñoz, aseguró que lo hicieron porque fueron amenazados por nativos armados con flechas.
Asimismo señalaron que muchas mujeres indígenas fueron separadas de sus hijos y pedían ayuda para hallarlos antes de que se pierdan en el bosque.
La directora del Servicio Nacional de Migración, María René Quiroga, presentó al Ministro de Gobierno, Sacha LLorenti, su renuncia irrevocable al cargo tras cinco años de servicio por no compartir la violenta intervención policial.
Por su parte el Presidente Evo Morales pidió disculpas por el maltrato policial y declaró que "queda suspendido el proyecto de carretera en el Parque Isiboro Sécure".
Los 1.500 manifestantes eran miembros del Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro-Secure (TIPNIS) un área protegida de Bolivia, creado como Parque Nacional en 1965 y declarado Territorio Indígena en 1990.
No hay comentarios:
Publicar un comentario