El Arzobispo de Huancayo, Mons. Pedro Barreto Jimeno,
SJ., presidió las celebraciones en honor a Santo Domingo de Guzmán, patrono de
varios pueblos de la Arquidiócesis. En el distrito de Sicaya, donde el fervor
es grande a Santo Domingo, San Francisco y San Juan de Dios, presidió una Santa
Misa multitudinaria, con la asistencia de las autoridades locales y de las
congregaciones religiosas.
En su prédica, Mons. Pedro Barreto manifestó que, Santo
Domingo descubrió la gran riqueza de Jesús y por eso su amor y seguimiento a
Jesús que, se hace presente con el Evangelio que es una buena noticia para
todos. Señaló que la alegría de Jesús es fruto de la novedad de la Iglesia, una
alegría que nos invita también a ser alegres, porque la alegría es encuentro
con Jesús, como la fiesta de Santo Domingo que no sólo es social, sino de
reflexión en torno a su figura.
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