UNA
PALABRA DE ESPERANZA
«Sepan que yo estoy con ustedes
todos los días hasta el fin de los tiempos» (Mt 28,20)
Mensaje de la Presidencia del Consejo
Episcopal Latinoamericano y Caribeño A los hermanos obispos, sacerdotes,
religiosos y religiosas, y a todos los demás miembros del pueblo santo de Dios
Bogotá D.C., Marzo 18 de 2020
Desde el Consejo Episcopal Latinoamericano,
a través de las Conferencias Episcopales del Continente, manifestamos nuestra
cercanía con los hermanos obispos, sacerdotes, religiosos y religiosas, laicos
comprometidos y comunidades cristianas en general, ante la difícil situación
que se vive generada por la rápida expansión del COVID- 19.
- A los ministros ordenados, Obispos y
Presbíteros que como pastores acompañan al pueblo de Dios, ofreciendo
diariamente por ellos la Santa Misa, especialmente por los enfermos, les
animamos y acompañamos a fortalecer creativamente la “cultura del
encuentro” a través de los espacios virtuales que hoy permite la
tecnología.
- A aquellos sacerdotes, religiosos, religiosas
y laicos comprometidos que acompañan físicamente a los enfermos, las
personas sin techo, los migrantes, deseamos que en su misión samaritana el
Señor les proteja y el Espíritu Santo confirme sus gestos concretos de
caridad con palabras de fortaleza, consuelo y esperanza.
- A nuestros queridos laicos, les expresamos nuestra
constante oración y agradecemos la comprensión en momentos tan
excepcionales como el que estamos viviendo. Si bien, en cumplimiento de
leyes gubernamentales de las cuales no estamos exentos, en muchas Diócesis
se ha debido reglamentar el cierre de los templos, sus pastores no les
dejan solos: diariamente rezan por ustedes, ofrecen la Eucaristía y
procuran implementar espacios de encuentro a través de las herramientas
tecnológicas. La presencia de Dios no se queda encerrada en los muros de
las Iglesias, cada bautizado es un templo viviente donde Dios habita. Les
animamos a hacer de cada hogar una auténtica Iglesia doméstica donde se
vive en familia la oración y la caridad cristiana en la ayuda, protección
y acompañamiento mutuo.
- Las medidas que los Estados están tomando y
que como Iglesia acogemos, tienen como objetivo el bien común y la
especial protección de las personas más susceptibles a padecer con mayor
rigor, incluso con el riesgo de sus vidas, las consecuencias de este
virus.
- A las personas que han resultado contagiadas
con el Coronavirus, especialmente a quienes padecen sus consecuencias de
modo más severo, les deseamos que Jesús el Buen Pastor sea fortaleza en
medio de la debilidad. Estamos rezando por ustedes para que recobren la
salud.
- A los operadores de la salud, médicos,
enfermeras y demás profesionales, agradecemos la entrega que hacen por
nuestros hermanos y hermanas enfermas. Con su servicio hacen vida la obra
de misericordia de ayudar a los enfermos. Con nuestra oración les
acompañamos y pedimos a Dios que les proteja.
- Finalmente, les alentamos a no perder la
esperanza y a poner toda la confianza en el Señor, con el cual podremos
superar todas las adversidades que la vida nos presente. Les pedimos
invocar a la Bienaventurada Virgen María rezando la Oración que el Papa
Francisco ha compuesto con esta finalidad.
Oh María,
Tú resplandeces siempre en nuestro
camino como signo de salvación y esperanza. Nosotros nos encomendamos a Ti,
salud de los enfermos, que ante la Cruz fuiste asociada al dolor de Jesús
manteniendo firme tu fe.
Tú, Salvación del Pueblo Romano,
sabes lo que necesitamos y estamos seguros de que proveerás para que, como en
Caná de Galilea, pueda regresar la alegría y la fiesta después de este momento
de prueba.
Ayúdanos, Madre del Divino Amor, a
conformarnos a la voluntad del Padre y a hacer lo que nos dirá Jesús, que ha
tomado sobre sí nuestros sufrimientos. Y ha tomado sobre sí nuestros dolores
para llevarnos, a través de la Cruz, al gozo de la Resurrección.
Amén.
Bajo tu protección, buscamos refugio,
Santa Madre de Dios. No desprecies las súplicas de los que estamos en la prueba
y líbranos de todo peligro, ¡oh Virgen gloriosa y bendita!
Unidos en oración y firmes en Cristo.
Mons.
Miguel Cabrejos Vidarte,O.F.M.
Arzobispo de Trujillo,
Perú
Presidente
Conferencia Episcopal Peruana
Presidente del
CELAM
Mons. Juan
Carlos Cárdenas Toro
Obispo Auxiliar de
Cali
Secretario General
del CELAM
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