Virgen de las Angustias, patrona de Granada, España. De José Manuel Ferro Ríos - Trabajo propio, CC BY 3.0, https://commons.wikimedia.org/w/index.php?curid=15733727 |
Los 7 Dolores
·
1º. La
profecía de Simeón (Lc. 2, 22-35) ¡Dulce Madre mía! Al presentar a
Jesús en el templo, la profecía del anciano Simeón te sumergió en profundo
dolor al oírle decir: “Este Niño está puesto para ruina y resurrección de
muchos de Israel, y una espada traspasará tu alma”. De este modo quiso el Señor
mezclar tu gozo con tan triste recuerdo. Rezar Avemaría y Gloria.
·
2º. La
persecución de Herodes y la huida a Egipto (Mt. 2, 13-15) ¡Oh Virgen
querida!, quiero acompañarte en las fatigas, trabajos y sobresaltos que
sufriste al huir a Egipto en compañía de San José para poner a salvo la vida
del Niño Dios. Rezar Avemaría y Gloria.
·
3º. Jesús
perdido en el Templo, por tres días (Lc. 2, 41-50) ¡Virgen Inmaculada!
¿Quién podrá pasar y calcular el tormento que ocasionó la pérdida de Jesús y
las lágrimas derramadas en aquellos tres largos días? Déjame, Virgen mía, que
yo las recoja, las guarde en mi corazón y me sirva de holocausto y
agradecimiento para contigo. Rezar Avemaría y Gloria.
·
4º. María
encuentra a Jesús, cargado con la Cruz (Vía Crucis, 4.ª estación)
Verdaderamente, calle de la amargura fue aquella en que encontraste a Jesús tan
sucio, afeado y desgarrado, cargado con la cruz que se hizo responsable de
todos los pecados de los hombres, cometidos y por cometer. ¡Pobre Madre! Quiero
consolarte enjugando tus lágrimas con mi amor. Rezar Avemaría y Gloria.
·
5º. La
Crucifixión y Muerte de Nuestro Señor (Jn. 19, 17-30) María, Reina de
los mártires, el dolor y el amor son la fuerza que los lleva tras Jesús, ¡qué
horrible tormento al contemplar la crueldad de aquellos esbirros del infierno
traspasando con duros clavos los pies y manos del salvador! Todo lo sufriste
por mi amor. Gracias, Madre mía, gracias. Rezar Avemaría y Gloria.
·
6º. María
recibe a Jesús bajado de la Cruz (Mc. 15, 42-46) Jesús muerto en
brazos de María. ¿Qué sentías Madre? ¿Recordabas cuando Él era pequeño y lo
acurrucabas en tus brazos?. Por este dolor te pido, Madre mía, morir entre tus
brazos. Rezar Avemaría y Gloria.
·
7º. La
sepultura de Jesús (Jn. 19, 38-42) Acompañas a tu Hijo al sepulcro y
debes dejarlo allí, solo. Ahora tu dolor aumenta, tienes que volver entre los
hombres, los que te hemos matado al Hijo, porque Él murió por todos nuestros
pecados. Y Tú nos perdonas y nos amas. Madre mía perdón, misericordia. Rezar
Avemaría y Gloria.
No hay comentarios:
Publicar un comentario