El beato Ceferino Namuncurá Burgos nació en Chimpay, Río Negro el 26 de agosto de 1886 y murió en Roma el 11 de mayo de 1905, era un joven laico salesiano argentino de orígenes mapuches y criollos. Cursó sus estudios primarios en una escuela en Tigre y luego en el Colegio Pío IX de Buenos Aires. En 1903, el joven decidió su vocación sacerdotal. Por razones de salud, los salesianos lo trasladaron a Viedma y allí monseñor Juan Cagliero tomó a Namuncurá como ahijado en 1898. El religioso llevó a Namuncurá a Italia para que sea tratado de tuberculosis y para completar su formación teológica. El acontecimiento de su vida ocurrió cuando Ceferino visitó al Papa Pío X. Le encomendaron la tarea de pronunciar un breve discurso con unas emocionadas palabras. Pío X se conmueve, lo bendice y le obsequia la medalla destinada a los príncipes. Ceferino Namuncurá murió el 11 de mayo de 1905 en Italia y sus restos fueron repatriados en 1924.
El 7 de julio de 2007 el papa Benedicto XVI firmó el decreto que declara a Ceferino Namuncurá como beato.
Biografía ampliada (AciPrensa)
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