Domingo, 24 jul (RV).- En Perú, por invitación la ministra de Justicia y presidenta del Consejo de ministros, Rosario Fernández, el presidente de la Conferencia Episcopal peruana, monseñor Miguel Cabrejos Vidarte, Arzobispo de Trujillo y el Obispo Emérito de Chimbote, monseñor Luis Bambarén, concelebraron este viernes 22 de julio una Santa Misa en la Capilla del Penal San Juan de Lurigancho. La nota de prensa del episcopado informa que decenas de internos participaron de la celebración eucarística- cual fue calificada por la Ministra Fernández como un hecho especial, porque se ha podido ofrecer "una voz de esperanza".
Durante su homilía, Monseñor Cabrejos se refirió a la dignidad del hombre y la realidad del pecado. “La adversidad –explicó- ayuda a veces al hombre a entrar en sí mismo, interrogándose por el sentido de su vida, por su propio camino en la existencia, por su responsabilidad en ella, por su destino. Y afirmó que “en efecto, aun en medio del dolor o el fracaso, Dios mismo nos está revelando lo que somos y lo que estamos llamados a ser”.
En otro momento, el presidente de la Conferencia Episcopal manifestó que “a pesar de los motivos de dolor y desaliento que seguramente descubrimos en el pasado o en el presente, podemos y debemos mirar al futuro con esperanza: no sólo con la esperanza humana de que un día podemos de nuevo vivir en libertad, sino sobre todo con la esperanza sobrenatural, la que da Cristo, con la cual debemos vivir ya ahora, en el presente, sin temor de quedar defraudados”.
Finalmente, los internos agradecieron la colaboración y despidieron en aplausos a los Obispos y a la Ministra Fernández, quien donó a la Capilla un crucifijo y un sagrario.
Fuente: Radio Vaticano y Ceas.
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