Texto del Evangelio (Mt 23,1-12): En aquel tiempo, Jesús se dirigió a la
gente y a sus discípulos y les dijo: «En la cátedra de Moisés se han sentado
los escribas y los fariseos. Haced, pues, y observad todo lo que os digan; pero
no imitéis su conducta, porque dicen y no hacen. Atan cargas pesadas y las
echan a las espaldas de la gente, pero ellos ni con el dedo quieren moverlas.
Todas sus obras las hacen para ser vistos por los hombres; se hacen bien anchas
las filacterias y bien largas las orlas del manto; quieren el primer puesto en
los banquetes y los primeros asientos en las sinagogas, que se les salude en
las plazas y que la gente les llame "Rabbí".
»Vosotros,
en cambio, no os dejéis llamar "Rabbí", porque uno solo es vuestro
Maestro; y vosotros sois todos hermanos. Ni llaméis a nadie "Padre"
vuestro en la tierra, porque uno solo es vuestro Padre: el del cielo. Ni
tampoco os dejéis llamar "Doctores", porque uno solo es vuestro
Doctor: Cristo. El mayor entre vosotros será vuestro servidor. Pues el que se
ensalce, será humillado; y el que se humille, será ensalzado».
Comentario: Pbro. Gerardo GÓMEZ (Merlo, Buenos Aires, Argentina).
«Uno
solo es vuestro Maestro; (...) uno solo es vuestro Padre; (...) uno solo es
vuestro Doctor»