Obispo y Doctor de la Iglesia.
Martirologio Romano: San Anselmo, obispo y doctor de
la Iglesia, que, nacido en Aosta, fue monje y abad del monasterio de Bec, en
Normandía, enseñando a los hermanos a caminar por la vía de la perfección y a
buscar a Dios por la comprensión de la fe. Promovido a la insigne sede de
Canterbury, en Inglaterra, trabajó denodadamente por la libertad de la Iglesia,
sufriendo por ello dificultades y destierros (1109).
Etimológicamente: Anselmo = Aquel que tiene la
protección divina, es de origen germánico.
San Anselmo nació en Aosta (Italia) en 1033 de noble
familia. Desde muy niño se sintió inclinado hacia la vida contemplativa. Pero
su padre, Gandulfo, se opuso: no podía ver a su primogénito hecho un monje;
anhelaba que siguiera sus huellas. A causa de esto, Anselmo sufrió tanto que se
enfermó gravemente, pero el padre no se conmovió. Al recuperar la salud, el
joven pareció consentir al deseo paterno. Se adaptó a la vida mundana, y hasta
pareció bien dispuesto a las fáciles ocasiones de placeres que le proporcionaba
su rango; pero en su corazón seguía intacta la antigua llamada de Dios.