Una imagen de la Virgen cruza la meta con la atleta que
ganó el oro en las Olimpiadas de Londres
La atleta etíope Meseret Defar protagonizó uno de los
momentos más emotivos de las Olimpiadas de Londres 2012 cuando al cruzar la
meta en la final femenina de los 5.000 metros lisos (planos) y hacerse de la
medalla de oro, sacó de su pecho una imagen de la Virgen María, la mostró a las
cámaras y se la puso en el rostro en un momento de intensa oración.
Defar, cristiana ortodoxa, encomendó su carrera a Dios con
una señal de la cruz y completó la distancia en 15:04:25, venciendo a su
compatriota y tradicional rival Tirunesh Dibaba, quien llegó como favorita de
la prueba.