Ciudad del Vaticano, 21 noviembre 2012 (VIS).- "Cooperación
católica y musulmana para la promoción de la justicia en el mundo
contemporáneo" ha sido el tema del octavo encuentro entre el Consejo Pontificio para el Diálogo Interreligioso y el Centro para el Diálogo
Interreligioso de la Organización para la Cultura y Relaciones Islámicas (ICRO). La reunión ha tenido lugar en Roma del 19 al 21 noviembre bajo la presidencia
conjunta del cardenal Jean-Louis Tauran, presidente del Pontificio Consejo y de
Mohammad Bagher Korramshad, Presidente de ICRO.
El tema del encuentro se ha dividido en cuatro sub-temas,
desde el punto de vista de los católicos y de los musulmanes chiítas: 1) El
concepto de justicia; 2) Justicia para la persona humana; 3) Justicia para los
distintos componentes de la sociedad; 4) Justicia para toda la familia humana.
Al final se ha emitido un comunicado conjunto en el que ambas partes expresan
su preocupación por los retos actuales, como la crisis económica, la defensa
del medio ambiente, el debilitamiento de la familia como institución básica de
la sociedad y las amenazas a la paz mundial. Los participantes, reconociendo
tanto las convergencias como las diferencias, se han centrado en el terreno
común y los valores compartidos:
1.- “La creencia que compartimos en el Dios que creó todas
las cosas, dando a cada uno de nosotros una comprensión holística de la
justicia. Los distintos ámbitos de su aplicación están relacionados entre sí:
personal, comunitario, social, político, económico, cultural y judicial”.
2. “La justicia como una virtud basada en la dignidad
humana exige el ejercicio correcto de la razón y la iluminación de Dios. El
reconocimiento y el respeto de la libertad de conciencia, entre otras cosas,
son los requisitos de la justicia en nuestras sociedades”.
3.”La naturaleza dinámica del concepto de justicia permite
que sea adaptado a los nuevos desafíos del mundo contemporáneo”.
4. “La responsabilidad de los líderes religiosos, las
instituciones y, de hecho, cada creyente a la hora de denunciar la injusticia y
la opresión en todas sus formas y promover la justicia en todo el mundo.
Creemos que nuestras religiones poseen recursos que pueden inspirar a la gente
a trabajar para que la justicia y la paz sean una realidad”.
5. “La exigencia de que, en favor de la promoción de la
justicia en el mundo de hoy, los musulmanes y los cristianos continúen
profundizando la comprensión de sí a través de un diálogo y una cooperación
permanentes”.
6. “La necesidad de ver los frutos de nuestra reunión y
comunicarlos a los miembros de nuestras respectivas comunidades y sociedades
para que puedan tener un efecto real en el mundo”.
Los participantes han manifestado su alegría y se han
sentido honrados de ser recibidos al final de la reunión por el Papa, que les
ha saludado y animado a continuar en el camino de un diálogo auténtico y
fructífero. El próximo coloquio, precedido por una reunión preparatoria, tendrá
lugar en Teherán (Irán) dentro dos años.
No hay comentarios:
Publicar un comentario