sábado, 31 de diciembre de 2011

Nigeria: Jornada de ayuno y oración por víctimas de los atentados


31-12-2011 Radio Vaticana

Sábado, 31 dic (RV).- El arzobispo de Ibadan y presidente de la Conferencia Episcopal de Nigeria, Mons. Ade Job, declaró este 31 de diciembre una jornada de oración y ayuno por las víctimas de los atentados de Navidad contra algunas iglesias en el País. En un Mensaje el prelado africano exhorta a orar por Nigeria en dificultad, por la paz, la Nación y por el buen gobierno. Mons. Job afirma en su mensaje que el perdón es aquello que el Señor Jesús nos enseñó. Sin embargo, la Iglesia local lanza un llamamiento a las autoridades islámicas del País: “Los miembros de la secta Boko Haram han reivindicado la responsabilidad de este crimen vergonzoso contra Dios y contra la humanidad. Aprovechamos de esta ocasión para exhortar a nuestros pacíficos conciudadanos musulmanes, y en particular a sus líderes políticos, económicos, sociales y religiosos, no solo a denunciar públicamente estos actos, sino a denunciar públicamente estos actos, sino que también, por el bien de ellos y de Nigeria, permanezcan activos haciendo todo lo posible por poner fin a este movimiento.

Mons. Job, presidente de la Conferencia Episcopal de Nigeria escribe en su Mensaje que la secta Boko Haram, aparentemente ha declarado la guerra a Nigeria, y en tiempos de guerra las naciones hacen un llamamiento a sus reservas. Es evidente –observa- que si tuviéramos que depender solo de las fuerzas de agentes de seguridad actualmente activa, no se lograrían muchos progresos, por este motivo se dirige al Presidente de Nigeria, para que llame a la acción a expertos criminólogos jubilados, y que utilice asesores extranjeros en este campo a fin de reforzar las agencias de seguridad y poner inmediatamente fin a la amenaza de este grupo extremista.

(PLJR – RV)

Esperanza de Paz en Cuba de cara al Jubileo Mariano: Virgen de la Caridad

31-12-2011 Radio Vaticana

Sábado, 31 dic (RV).- Este 30 de diciembre, en el marco de la Fiesta de la Sagrada Familia, tuvo lugar en la Catedral de la Habana la Misa de clausura por las celebraciones de la Peregrinación Nacional de la Virgen de la Caridad del Cobre, presidida por el Cardenal Jaime Ortega y Alamino. Con esta Celebración Eucarística se puso fin a la Peregrinación Nacional de la milagrosa imagen por todo el territorio. En su homilía el purpurado manifestó el agradecimiento por parte de la Iglesia local a las más altas autoridades Cuba por respetar el derecho y facilitar el deber de la Iglesia a lo largo de este año y medio de manifestaciones religiosas en torno a la Santísima Virgen destacando la disponibilidad y el apoyo brindado por las instancias oficiales para su realización.

“Educación y paz”

31-12-2011 Radio Vaticana

Sábado, 31 dic (RV). Educar a los jóvenes en la justicia y en la paz”: es el Mensaje del Papa para la Jornada Mundial de la Paz, del 1° de enero.

Hasta ahora no ha tenido el eco que se merece. Pero cada tanto sucede: no siempre las cosas más importantes son aquellas de las que se habla más. En realidad, si los jóvenes hoy no son educados a la paz, ciertamente la paz mañana no existirá.

Con ocasión de los grandes cambios iniciados en el Norte de África y en Oriente Medio, o también en los movimientos de los indignados que han recorrido los países occidentales, desde España hasta Inglaterra o los Estados Unidos, la atención se ha dirigido con frecuencia los jóvenes, a sus frustraciones y a sus expectativas, a su modo de comunicarlas y de expresarlas. ¿Cuáles serán los éxitos, más allá del breve período que han tenido en las primeras páginas de los medios de comunicación? Depende en gran parte de la educación, de lo contrario, a las frustraciones de hoy seguirán, inevitablemente, las de mañana y de pasado de mañana.

“La educación es la aventura más fascinante y difícil de la vida” –afirma el Papa–. Y todos estamos implicados en ello. El mensaje del Papa no se limita a animar o exaltar un papel activo de los jóvenes. Hace comprender que sus premisas vienen del servicio responsable de los educadores, que no son sólo los padres y los maestros, sino también los políticos y los agentes de los medios de comunicación: todos aquellos, en suma, que pueden y deben transmitir una orientación a esos valores sobre los que se construye una sociedad justa y pacífica, y facilitar esos pasos de crecimiento cultural y de inserción social que acercan a esta meta. Si esos valores son destruidos por el relativismo y por una exaltación de la libertad arbitraria, si no son propuestos con testimonios concretos de honestidad, de empeño y de solidaridad –digamos también incluso de amor–… mañana no habrá justicia ni paz. Si se quiere que el mañana del mundo sea menos oscuro, es necesario afrontar con decisión las “emergencias educativas” de hoy.

(Traducción de María Fernanda Bernasconi – RV).

Nota: Enlace al Mensaje de Benedicto XVI (Español) World Day Peace (English).

Con el Papa, un nuevo año guiados por María: fe, esperanza y caridad


31-12-2011 Radio Vaticana

Viernes, 30 dic (RV).- Con las primeras Vísperas de la Solemnidad de María Santísima Madre de Dios, cada 31 de diciembre, y luego el primer día de cada año, octava de la Navidad, la Iglesia que peregrina en el mundo, unida al Santo Padre, contempla con especial ternura y esperanza a Jesucristo, el recién nacido Príncipe de la Paz:

Voz del Papa: La Iglesia celebra la solemnidad de Santa María, Madre de Dios, y también la Jornada Mundial de la Paz. Os invito a entrar en la escuela de la Virgen Santísima, fiel discípula del Señor, para aprender de Ella a acoger en la fe y en la oración la salvación que Dios quiere derramar sobre los que confían en su paz y amor misericordioso.

«El comienzo de un Año nuevo, don de Dios a la humanidad, es una invitación a desear a todos, con mucha confianza y afecto, que este tiempo que tenemos por delante esté marcado por la justicia y la paz», escribe Benedicto XVI en su mensaje para la Jornada Mundial de la Paz 2012. Alentando a mirar el nuevo año, con la bella imagen del salmo 130: el hombre de fe aguarda al Señor «más que el centinela la aurora» (v. 6), lo aguarda con una sólida esperanza, porque sabe que traerá luz, misericordia, salvación, el Papa -sin olvidar la crisis que agobia a la sociedad, al mundo del trabajo y la economía; una crisis cuyas raíces son sobre todo culturales y antropológicas– invita a la confianza. Con el lema de este mensaje, Benedicto XVI exhorta a «Educar a los jóvenes en la justicia y la paz», convencido de que ellos, «con su entusiasmo y su impulso hacia los ideales, pueden ofrecer al mundo una nueva esperanza».

Y qué mejor que concluir un año y empezar otro, acogiendo las incansables exhortaciones de Benedicto XVI a poner con total confianza todos nuestros proyectos e intenciones en las manos providentes de Dios, para que acompañados por María, sea Él el que guíe nuestros pasos cada día y acreciente en nosotros la fe, la esperanza y la caridad.

Para Radio Vaticano, Cecilia de Malak.

Evangelio del día [31.12.2011]

Día litúrgico: 31 de Diciembre (Día séptimo de la octava de Navidad)


Texto del Evangelio (Jn 1,1-18): En el principio existía la Palabra y la Palabra estaba con Dios, y la Palabra era Dios. Ella estaba en el principio con Dios. Todo se hizo por ella y sin ella no se hizo nada de cuanto existe. En ella estaba la vida y la vida era la luz de los hombres, y la luz brilla en las tinieblas, y las tinieblas no la vencieron.

Hubo un hombre, enviado por Dios: se llamaba Juan. Éste vino para un testimonio, para dar testimonio de la luz, para que todos creyeran por Él. No era él la luz, sino quien debía dar testimonio de la luz.

La Palabra era la luz verdadera que ilumina a todo hombre que viene a este mundo. En el mundo estaba, y el mundo fue hecho por ella, y el mundo no la conoció. Vino a su casa, y los suyos no la recibieron. Pero a todos los que la recibieron les dio poder de hacerse hijos de Dios, a los que creen en su nombre; la cual no nació de sangre, ni de deseo de hombre, sino que nació de Dios. Y la Palabra se hizo carne, y puso su Morada entre nosotros, y hemos contemplado su gloria, gloria que recibe del Padre como Hijo único, lleno de gracia y de verdad.

Juan da testimonio de Él y clama: «Éste era del que yo dije: El que viene detrás de mí se ha puesto delante de mí, porque existía antes que yo». Pues de su plenitud hemos recibido todos, y gracia por gracia. Porque la Ley fue dada por medio de Moisés; la gracia y la verdad nos han llegado por Jesucristo. A Dios nadie le ha visto jamás: el Hijo único, que está en el seno del Padre, Él lo ha contado.

Comentario: Rev. D. David COMPTE i Verdaguer (Manlleu, Barcelona, España).

«Y la Palabra se hizo carne»

Hoy es el último día del año. Frecuentemente, una mezcla de sentimientos —incluso contradictorios— susurran en nuestros corazones en esta fecha. Es como si una muestra de los diferentes momentos vividos, y de aquellos que hubiésemos querido vivir, se hiciesen presentes en nuestra memoria. El Evangelio de hoy nos puede ayudar a decantarlos para poder comenzar el nuevo año con empuje.

«La Palabra era Dios (...). Todo se hizo por ella» (Jn 1,1.3). A la hora de hacer el balance del año, hay que tener presente que cada día vivido es un don recibido. Por eso, sea cual sea el aprovechamiento realizado, hoy hemos de agradecer cada minuto del año.

Pero el don de la vida no es completo. Estamos necesitados. Por eso, el Evangelio de hoy nos aporta una palabra clave: “acoger”. «Y la Palabra se hizo carne» (Jn 1,14). ¡Acoger a Dios mismo! Dios, haciéndose hombre, se pone a nuestro alcance. “Acoger” significa abrirle nuestras puertas, dejar que entre en nuestras vidas, en nuestros proyectos, en aquellos actos que llenan nuestras jornadas. ¿Hasta qué punto hemos acogido a Dios y le hemos permitido entrar en nosotros?

«La Palabra era la luz verdadera que ilumina a todo hombre que viene a este mundo» (Jn 1,9). Acoger a Jesús quiere decir dejarse cuestionar por Él. Dejar que sus criterios den luz tanto a nuestros pensamientos más íntimos como a nuestra actuación social y laboral. ¡Que nuestras actuaciones se avengan con las suyas!

«La vida era la luz» (Jn 1,4). Pero la fe es algo más que unos criterios. Es nuestra vida injertada en la Vida. No es sólo esfuerzo —que también—. Es, sobre todo, don y gracia. Vida recibida en el seno de la Iglesia, sobre todo mediante los sacramentos. ¿Qué lugar tienen en mi vida cristiana?

«A todos los que la recibieron les dio poder de hacerse hijos de Dios» (Jn 1,12). ¡Todo un proyecto apasionante para el año que vamos a estrenar!

Festividad de San Silvestre I

XXXIII Papa.

El largo pontificado de San Silvestre (del 314 al 335) transcurrió paralelo al gobierno del emperador Constantino, época muy importante para la Iglesia que acababa de salir de la clandestinidad y de las persecuciones. Fue en ese período cuando se formó una organización eclesiástica que duraría varios siglos. En esta obra tuvo Constantino un lugar de consideración. Este, efectivamente, era el heredero de la gran tradición romana imperial y por eso se consideraba el legítimo representante de la divinidad (nunca renunció a ostentar el titulo pagano de “pontifex maximus”), y por tanto del Dios de los cristianos.

Fue él, por tanto, y no el Papa Silvestre, quien convocó en el 314 un sínodo para acabar con el cisma que había estallado en África; y fue también él quien convocó en el 325 el primer concilio ecuménico de la historia, en Nicea (Bitinia), residencia veraniega del emperador.

Al obrar así, Constantino introdujo un método de intromisión del poder civil en los asuntos eclesiásticos que tendría desastrosas consecuencias. Pero por ahora las consecuencias fueron positivas, entre otras cosas por la buena armonía que reinaba entre el Papa Silvestre y Constantino. Este, en efecto, no ahorró sus aprobaciones y sus apoyos aún económicos para la vasta obra de construcción de edificios eclesiásticos.

Precisamente Constantino, en su calidad de “pontifex maximus”, fue quien pudo autorizar y consentir el “sacrilegium” de construir una gran basílica en honor de San Pedro sobre la colina Vaticana, después de haber parcialmente destruido o tapado el cementerio pagano, descubierto por las excavaciones ordenadas por Pío XII en 1939. Fue también la colaboración entre el Papa Silvestre y Constantino la que permitió la construcción de otras dos importantes basílicas romanas, una en honor de San Pablo sobre la vía Ostiense, y sobre todo la otra en honor de San Juan. Inclusive, Constantino quiso manifestar su simpatía por el papa Silvestre dándole su mismo palacio lateranense, que desde entonces y por varios siglos fue la residencia de los Papas.

¿Quieres saber más? Consulta ewtncorazones.org

Festividades del día 31 de Diciembre

Papa.

Obispo.

Penitente.

Hija de la Caridad.

viernes, 30 de diciembre de 2011

Estadísticas del año 2011 del Vaticano

29-12-2011 Radio Vaticana

Jueves, 29 dic (RV).- Como cada año la Prefectura de la Casa Pontificia hizo público el cuadro de la participación de los fieles en los varios encuentros con el Santo Padre Benedicto XVI: Audiencias generales y privadas, Celebraciones litúrgicas, Ángelus y Regina Coeli.

Si bien se trata de fechas aproximativas calculadas con base en las solicitudes de participación en los eventos hechas llegar a la Prefectura de la Casa Pontificia, y de los pases distribuidos por la misma, como también sobre una evaluación global de las presencias en momentos como el Ángelus o el Regina Coeli y las grandes Celebraciones en la Plaza de San Pedro y sobre todas, este año, la solemne ceremonia de Beatificación de Juan Pablo II.

Según las estadísticas presentadas, se destaca que hacen referencia solo a los encuentros en el Vaticano y en Castel Gandolfo y no incluyen otros momentos vividos por el Sumo Pontífice con una gran participación de fieles, por ejemplo las visitas en la Diócesis de Roma o las Visitas Pastorales en Italia, además, se recuerdan los Viajes Apostólicos realizados por Benedicto XVI en el 2011, a saber: Croacia, Madrid para la JMJ, Alemania, Benín.

En todas partes se ha asistido a una masiva participación de fieles, que han acompañado la visita del Papa con demostraciones de profundo afecto acompañadas por la escucha atenta de sus palabras.

De esta manera la participación en las Audiencias Generales de este año se suman 400.000 participantes a los 101.800 de las Audiencias especiales, 846.000 en las Celebraciones especiales y 1.206.000 en los encuentros dominicales y festivos para el rezo del Ángelus y el Regina Coeli, que hacen un total de participación de 2.553.800 personas a lo largo de este año 2011.

El balance desde el inicio del pontificado de Benedicto XVI suma desde 2005 hasta la fecha un total de 18.193.770 personas.

(PLJR – RV)

Oración a La Sagrada Familia de Nazaret


“Oremos hoy por todas las familias del mundo para que logren responder a su vocación tal y como respondió la Sagrada Familia de Nazaret.

Oremos especialmente por las familias que sufren, pasan por muchas dificultades o se ven amenazadas en su indisolubilidad y en el gran servicio al amor y a la vida para el que Dios las eligió” (Juan Pablo II).

“Oh Jesús, acoge con bondad a nuestra familia que ahora se entrega y consagra a Ti, protégela, guárdala e infunde en ella tu paz para poder llegar a gozar todos de la felicidad eterna.”

“Oh María, Madre amorosa de Jesús y Madre nuestra, te pedimos que intercedas por nosotros, para que nunca falte el amor, la comprensión y el perdón entre nosotros y obtengamos su gracia y bendiciones.”

“Oh San José, ayúdanos con nuestras oraciones en todas nuestras necesidades espirituales y temporales, a fin de que podamos agradar eternamente a Jesús. Amén.”

Festividad de La Sagrada Familia de Jesús


En el año 2011, dado que el domingo siguiente a Navidad es 1 de enero, día en que recordamos a María como Madre de Dios, esta fiesta se traslada al viernes 30 de diciembre.

En la festividad de la Sagrada Familia, recordamos y celebramos que Dios quiso nacer dentro de una familia para que tuviera alguien que lo cuidara, lo protegiera, lo ayudara y lo aceptara como era.

Al nacer Jesús en una familia, el Hijo de Dios ha santificado la familia humana. Por eso nosotros veneramos a la Sagrada Familia como Familia de Santos.

¿Cómo era la Sagrada Familia?
María y José cuidaban a Jesús, se esforzaban y trabajaban para que nada le faltara, tal como lo hacen todos los buenos padres por sus hijos.

José era carpintero, Jesús le ayudaba en sus trabajos, ya que después lo reconocen como el “hijo del carpintero”.

María se dedicaba a cuidar que no faltara nada en la casa de Nazaret.

Tal como era la costumbre en aquella época, los hijos ayudaban a sus mamás moliendo el trigo y acarreando agua del pozo y a sus papás en su trabajo. Podemos suponer que en el caso de Jesús no era diferente. Jesús aprendió a trabajar y a ayudar a su familia con generosidad. Él siendo Todopoderoso, obedecía a sus padres humanos, confiaba en ellos, los ayudaba y los quería.

¡Qué enseñanza nos da Jesús, quien hubiera podido reinar en el más suntuoso palacio de Jerusalén siendo obedecido por todos! Él, en cambio, rechazó todo esto para esconderse del mundo obedeciendo fielmente a María y a José y dedicándose a los más humildes trabajos diarios, el taller de San José y en la casa de Nazaret.

Las familias de hoy, deben seguir este ejemplo tan hermoso que nos dejó Jesús tratando de imitar las virtudes que vivía la Sagrada Familia: sencillez, bondad, humildad, caridad, laboriosidad, etc.

La familia debe ser una escuela de virtudes. Es el lugar donde crecen los hijos, donde se forman los cimientos de su personalidad para el resto de su vida y donde se aprende a ser un buen cristiano. Es en la familia donde se formará la personalidad, inteligencia y voluntad del niño. Esta es una labor hermosa y delicada. Enseñar a los niños el camino hacia Dios, llevar estas almas al cielo. Esto se hace con amor y cariño.

“La familia es la primera comunidad de vida y amor el primer ambiente donde el hombre puede aprender a amar y a sentirse amado, no sólo por otras personas, sino también y ante todo por Dios.” (Juan Pablo II, Encuentro con las Familias en Chihuahua 1990).

El Papa Juan Pablo II en su carta a las familias nos dice que es necesario que los esposos orienten, desde el principio, su corazón y sus pensamientos hacia Dios, para que su paternidad y maternidad, encuentre en Él la fuerza para renovarse continuamente en el amor.

Así como Jesús creció en sabiduría y gracia ante Dios y los hombres, en nuestras familias debe suceder lo mismo. Esto significa que los niños deben aprender a ser amables y respetuosos con todos, ser estudiosos obedecer a sus padres, confiar en ellos, ayudarlos y quererlos, orar por ellos, y todo esto en familia.

Recordemos que “la salvación del mundo vino a través del corazón de la Sagrada Familia”.

La salvación del mundo, el porvenir de la humanidad de los pueblos y sociedades pasa siempre por el corazón de toda familia. Es la célula de la sociedad.

Festividades del día 30 de Diciembre

Fiesta.

Obispo.

Personaje Bíblico.

Mártir.

Monja.

Presbítero y Fundador.

Virgen y Fundadora.

Fiesta, Domingo siguiente a la Navidad. En el 2011 se celebra el viernes 30.

Festividad del Traslado del cuerpo de Santiago


De hecho, por los breves apostólicos de dos papas, Gregorio XIII y Sixto V, se celebra en Santiago y en España la fiesta de la Traslación.

El rey Herodes mandó decapitar a Santiago. Fue el protomártir de los Apóstoles; luego le seguirían todos los demás y sucedió en la ciudad Santa de Jerusalén. Este es el dato histórico y punto de partida de una leyenda que parece ser un inverosímil juego imaginativo pero, como tantas veces sucede, la fantasía mejor intencionada cubre los espacios en blanco que la historia no puede rellenar con datos comprobables.

Y la leyenda se expone así resumiendo: Una vez muerto Santiago, los siete discípulos que había llevado consigo cuando estuvo en España robaron por la noche el cuerpo que Herodes prohibió enterrar y dejó expuesto a las aves, perros y alimañas. Ocultamente lo llevaron hasta el puerto de Jaffa donde milagrosamente encontraron una nave sin remeros ni piloto, pero con todo lo necesario para una larga travesía. Ayudados por un viento favorable y sin escollos ni tempestad arriban a Iria Flavia —hoy Padrón— cerca de Finisterre. Con esto cumplen el deseo que les había encargado el propio Santiago previendo el acontecimiento de su muerte.

Tierra adentro encuentran una gruta. Les parece sitio apto para depositar los restos mortales. Manos a la obra, destruyen un ídolo de piedra de los paganos del país y excavan en la piedra un sepulcro donde depositan el cuerpo con su cabeza que habían transportado. Luego levantan una casa que será capilla. Teodoro y Atanasio se quedarán custodiando la reliquia, mientras que los otros cinco compañeros saldrán por los campos y poblados a predicar el Evangelio. Cuando mueren los dos custodios reciben sepultura junto a los restos de Santiago.

Las invasiones y guerras que se suceden en el lugar son factores determinantes para que, junto con el mismo paso de los años, se relegue al olvido transitoriamente tanto el lugar ya tapado por los matorrales como el tesoro que contiene.

Cuando reina Alfonso el Casto se descubren los antiguos sepulcros y el rey manda edificar un templo. Y otros monarcas le siguen. Es Compostela. Los papas conceden privilegios, Urbano II desliga el obispado de la jurisdicción de Braga y con Calixto II comienza a ser arzobispado. Los milagros y las maravillas se producen en el tiempo para españoles y extranjeros. Se señala de modo muy especial la protección en la larga lucha de reconquista llegando a aplicársele el alias de "Matamoros" por haberlo visto con todas las armas precediendo al ejército cristiano. Las rutas del peregrinaje de Europa comienzan a tener otro camino para culminar el perdón de los pecados con arrepentimiento.

Evangelio de la Festividad de La Sagrada Familia

Día litúrgico: La Sagrada Familia (B)


Texto del Evangelio (Lc 2,22-40): Cuando se cumplieron los días de la purificación de ellos, según la Ley de Moisés, llevaron a Jesús a Jerusalén para presentarle al Señor, como está escrito en la Ley del Señor: Todo varón primogénito será consagrado al Señor y para ofrecer en sacrificio un par de tórtolas o dos pichones, conforme a lo que se dice en la Ley del Señor. Y he aquí que había en Jerusalén un hombre llamado Simeón; este hombre era justo y piadoso, y esperaba la consolación de Israel; y estaba en él el Espíritu Santo. Le había sido revelado por el Espíritu Santo que no vería la muerte antes de haber visto al Cristo del Señor. Movido por el Espíritu, vino al Templo; y cuando los padres introdujeron al niño Jesús, para cumplir lo que la Ley prescribía sobre él, le tomó en brazos y bendijo a Dios diciendo: «Ahora, Señor, puedes, según tu palabra, dejar que tu siervo se vaya en paz; porque han visto mis ojos tu salvación, la que has preparado a la vista de todos los pueblos, luz para iluminar a los gentiles y gloria de tu pueblo Israel». Su padre y su madre estaban admirados de lo que se decía de él. Simeón les bendijo y dijo a María, su madre: «Éste está puesto para caída y elevación de muchos en Israel, y para ser señal de contradicción -¡y a ti misma una espada te atravesará el alma!- a fin de que queden al descubierto las intenciones de muchos corazones».

Había también una profetisa, Ana, hija de Fanuel, de la tribu de Aser, de edad avanzada; después de casarse había vivido siete años con su marido, y permaneció viuda hasta los ochenta y cuatro años; no se apartaba del Templo, sirviendo a Dios noche y día en ayunos y oraciones. Como se presentase en aquella misma hora, alababa a Dios y hablaba del niño a todos los que esperaban la redención de Jerusalén.

Así que cumplieron todas las cosas según la Ley del Señor, volvieron a Galilea, a su ciudad de Nazaret. El Niño crecía y se fortalecía, llenándose de sabiduría; y la gracia de Dios estaba sobre Él.

Comentario: Rev. D. Joan Antoni MATEO i García (La Fuliola, Lleida, España).

«Llevaron a Jesús a Jerusalén para presentarle al Señor»

Hoy, celebramos la fiesta de la Sagrada Familia. Nuestra mirada se desplaza del centro del Belén —Jesús— para contemplar cerca de Él a María y José. El Hijo eterno del Padre pasa de la familia eterna, que es la Santísima Trinidad, a la familia terrenal formada por María y José. ¡Qué importante ha de ser la familia a los ojos de Dios cuando lo primero que procura para su Hijo es una familia!

Juan Pablo II, en su Carta apostólica El Rosario de la Virgen María, volvió a destacar la importancia capital que tiene la familia como fundamento de la Iglesia y de la sociedad humana, y nos ha pedido que recemos por la familia y que recemos en familia con el Santo Rosario para revitalizar esta institución. Si la familia va bien, la sociedad y la Iglesia irán bien.

El Evangelio nos dice que el Niño crecía y se fortalecía, llenándose de sabiduría. Jesús encontró el calor de una familia que se iba construyendo a través de sus recíprocas relaciones de amor. ¡Qué bonito y provechoso sería si nos esforzáramos más y más en construir nuestra familia!: con espíritu de servicio y de oración, con amor mutuo, con una gran capacidad de comprender y de perdonar. ¡Gustaríamos —como en el hogar de Nazaret— el cielo y la tierra! Construir la familia es hoy una de las tareas más urgentes. Los padres, como recordaba el Concilio Vaticano II, juegan ahí un papel insubstituible: «Es deber de los padres crear un ambiente de familia animado por el amor, por la piedad hacia Dios y hacia los hombres, y que favorezca la educación íntegra personal y social de los hijos». En la familia se aprende lo más importante: a ser personas.

Finalmente, hablar de familia para los cristianos es hablar de la Iglesia. El evangelista san Lucas nos dice que los padres de Jesús lo llevaron a Jerusalén para presentarlo al Señor. Aquella ofrenda era figura de la ofrenda sacrificial de Jesús al Padre, fruto de la cual hemos nacido los cristianos. Considerar esta gozosa realidad nos abrirá a una mayor fraternidad y nos llevará a amar más a la Iglesia.

jueves, 29 de diciembre de 2011

Evangelio del día [29.12.2011]

Día litúrgico: 29 de Diciembre (Día quinto de la octava de Navidad).

Texto del Evangelio (Lc 2,22-35): Cuando se cumplieron los días de la purificación según la Ley de Moisés, llevaron a Jesús a Jerusalén para presentarle al Señor, como está escrito en la Ley del Señor: Todo varón primogénito será consagrado al Señor y para ofrecer en sacrificio un par de tórtolas o dos pichones, conforme a lo que se dice en la Ley del Señor.

Y he aquí que había en Jerusalén un hombre llamado Simeón; este hombre era justo y piadoso, y esperaba la consolación de Israel; y en él estaba el Espíritu Santo. Le había sido revelado por el Espíritu Santo que no vería la muerte antes de haber visto al Cristo del Señor. Movido por el Espíritu, vino al Templo; y cuando los padres introdujeron al Niño Jesús, para cumplir lo que la Ley prescribía sobre Él, le tomó en brazos y bendijo a Dios diciendo: «Ahora, Señor, puedes, según tu palabra, dejar que tu siervo se vaya en paz; porque han visto mis ojos tu salvación, la que has preparado a la vista de todos los pueblos, luz para iluminar a los gentiles y gloria de tu pueblo Israel».

Su padre y su madre estaban admirados de lo que se decía de Él. Simeón les bendijo y dijo a María, su madre: «Éste está puesto para caída y elevación de muchos en Israel, y para ser señal de contradicción -¡y a ti misma una espada te atravesará el alma!- a fin de que queden al descubierto las intenciones de muchos corazones».

Comentario: Chanoine Dr. Daniel MEYNEN (Saint Aubain, Namur, Bélgica).

«Ahora, Señor, puedes (...) dejar que tu siervo se vaya en paz; porque han visto mis ojos tu salvación»

Hoy, 29 de diciembre, festejamos al santo Rey David. Pero es a toda la familia de David que la Iglesia quiere honrar, y sobre todo al más ilustre de todos ellos: ¡A Jesús, el Hijo de Dios, Hijo de David! Hoy, en ese eterno “hoy” del Hijo de Dios, la Antigua Alianza del tiempo del Rey David se realiza y se cumple en toda su plenitud. Pues, como relata el Evangelio de hoy, el Niño Jesús es presentado al Templo por sus padres para cumplir con la antigua Ley: «Cuando se cumplieron los días de la purificación según la Ley de Moisés, llevaron a Jesús a Jerusalén para presentarle al Señor, como está escrito en la Ley del Señor: Todo varón primogénito será consagrado al Señor» (Lc 2,22-23).

Hoy, se eclipsa la vieja profecía para dejar paso a la nueva: Aquel, a quien el Rey David había anunciado al entonar sus salmos mesiánicos, ¡ha entrado por fin en el Templo de Dios! Hoy es el gran día en que aquel que San Lucas llama Simeón pronto abandonará este mundo de oscuridad para entrar en la visión de la Luz eterna: «Ahora, Señor, puedes, según tu palabra, dejar que tu siervo se vaya en paz; porque han visto mis ojos tu salvación, la que has preparado a la vista de todos los pueblos» (Lc 2,29-32).

También nosotros, que somos el Santuario de Dios en el que su Espíritu habita (cf. 1Cor 3,16), debemos estar atentos a recibir a Jesús en nuestro interior. Si hoy tenemos la dicha de comulgar, pidamos a María, la Madre de Dios, que interceda por nosotros ante su Hijo: que muera el hombre viejo y que el nuevo hombre (cf. Col 3,10) nazca en todo nuestro ser, a fin de convertirnos en los nuevos profetas, los que anuncien al mundo entero la presencia de Dios tres veces santo, ¡Padre, Hijo y Espíritu Santo!

Como Simeón, seamos profetas por la muerte del “hombre viejo”! Tal como dijo el Papa Juan Pablo II, «la plenitud del Espíritu de Dios viene acompañada (…) antes que nada por la disponibilidad interior que proviene de la fe. De ello, el anciano Simeón, ‘hombre justo y piadoso’, tuvo la intuición en el momento de la presentación de Jesús en el Templo».

Festividades del día 29 de Diciembre

Obispo y mártir.

Mártir Jesuita.

Rey y Profeta.

Sacerdote y Mártir.

Sacerdote y Mártir.

Mártir Laico.

Franciscano.

Mártir.

Completando el santoral de este día.

Festividad de Santo Tomás Becket

Obispo y mártir.

Martirologio Romano: Santo Tomás Becket, obispo y mártir, que por defender la justicia y la Iglesia fue obligado a desterrarse de la sede Canterbury y de la misma Inglaterra, volviendo al cabo de seis años a su patria, donde padeció mucho hasta que fue asesinado en la catedral por los esbirros del rey Enrique II, emigrando a Cristo (1170).

Etimología: Tomás = gemelo, mellizo; viene del arameo.

Una de las más adivinadas elecciones del gran soberano inglés, Enrique II, fue la de su canciller en la persona de Tomás Becket. Había nacido en Londres en 1118 de padre normando, y fue ordenado archidiácono y colaborador del arzobispo de Canterbury, Teobaldo. Como canciller del reino, Tomás se sentía perfectamente a sus anchas: tenía ambición, audacia, belleza y un destacado gusto por la magnificencia. Cuando era necesario sabía ser valiente, sobre todo cuando se trataba de defender los buenos derechos de su príncipe, de quien era íntimo amigo y compañero en los momentos de descanso y de diversión.

El arzobispo Teobaldo murió en 1161, y Enrique II, gracias al privilegio que le había concedido el Papa, pudo elegir a Tomás como sucesor para la sede primada de Canterbury. Nadie, y mucho menos el rey, se imaginaba que un personaje tan “mencionado” se iba a transformar inmediatamente en un gran defensor de los derechos de la Iglesia y en un celoso pastor de almas. Pero Tomás le había advertido a su rey: “Señor, si Dios permite que yo sea arzobispo de Canterbury, perderé la amistad de Vuestra Majestad”.

Ordenado sacerdote el 3 de junio de 1162 y consagrado obispo al día siguiente, Tomás Becket no tardó en enemistarse con el soberano. Las “Constituciones” de 1164 habían restablecido ciertos derechos abusivos del rey caídos en desuso. Por eso Tomás Becket no quiso reconocer las nuevas leyes y escapó a las iras del rey huyendo a Francia, en donde pasó seis años de destierro, llevando una vida ascética en un monasterio cisterciense.

Restablecida con el rey una paz formal, gracias a los consejos de moderación del Papa Alejandro III, con quien se encontró, Tomás pudo regresar a Canterbury y fue recibido triunfalmente por los fieles, a quienes él saludó con estas palabras: “He regresado para morir entre ustedes”. Como primer acto desautorizó a los obispos que habían hecho pactos con el rey, aceptando las “Constituciones”, y esta vez el rey perdió la paciencia y se dejó escapar esta frase imprudente: “¿Quién me quitará de entre los pies a este cura intrigante?”.

Hubo quien se encargó de eso. Cuatro caballeros armados salieron para Canterbury. Se le avisó al arzobispo, pero él permaneció en su puesto: “El miedo a la muerte no puede hacernos perder de vista la justicia”. Recibió a los sicarios del rey en la catedral, revestido con los ornamentos sagrados. Se dejó apuñalar sin oponer resistencia, murmurando: “Acepto la muerte por el nombre de Jesús y por la Iglesia”. Era el 23 de diciembre de 1170. Tres años después el Papa Alejandro III lo inscribió en la lista de los santos.

miércoles, 28 de diciembre de 2011

Se aprende a orar en casa


28-12-2011 Radio Vaticana

Miércoles, 28 dic (RV).- Esta mañana a las 10,30 en el Aula Pablo VI del Vaticano Benedicto XVI celebró su cuadragésimo quinta y última audiencia general de este año 2011, en su encuentro semanal con los fieles y peregrinos venidos de todo el mundo para escuchar el Magisterio del Santo Padre. La Navidad como escuela de oración donde se aprende a escuchar y a descubrir siguiendo el ejemplo de la Sagrada Familia ha sido el tema de hoy:

Texto Catequesis y saludos Papa en español.

Queridos hermanos y hermanas:

Las celebraciones de la Navidad, transidas de gozo interior por el nacimiento de Jesucristo, el Salvador, son propicias para avivar la fe y la oración. Este ambiente navideño me da pie para volver nuevamente al tema de la plegaria y cómo esta formaba parte de la vida cotidiana de la Sagrada Familia de Nazaret. Aquella casa, en efecto, es una escuela de oración, donde se aprende a escuchar y a descubrir el significado profundo de la manifestación del Hijo de Dios, a ejemplo de Jesús, José y María. La Sagrada Familia es icono de la Iglesia doméstica y una invitación a rezar juntos. Es en el seno del hogar donde los hijos se inician en la oración gracias a las enseñanzas de sus padres. Por consiguiente, una educación auténticamente cristiana no puede prescindir de la experiencia de la plegaria. Si la oración no se aprende en casa, es difícil después llenar este vacío.

Saludo a los peregrinos de lengua española, en particular a los fieles procedentes de la Diócesis de Girona, acompañados por su Obispo, Monseñor Francesc Pardo, así como a los demás grupos venidos de España, México y otros países latinoamericanos. Invito a todos a descubrir la belleza de rezar en el seno del hogar, asiduamente y en espíritu de comunión, siguiendo así el ejemplo de la Sagrada Familia de Nazaret. A la protección de Jesús, José y María encomiendo a los padres y a las madres de familia, para que inculquen en sus hijos el amor a la oración, invocando junto a ellos el Santo Nombre de Dios.

Os deseo un feliz año nuevo y que el Señor os bendiga copiosamente en estas fiestas y llene vuestro corazón de alegría y paz. Muchas gracias.

Festividades del día 28 de Diciembre

Festividad. Es buena ocasión de hacer agradable la vida a los demás.

Presbítero y Fundador.

Obispo y Mártir.

Fundadora.

Abadesa Clarisa.

Festividad de Los Santos Inocentes


La consulta bien intencionada de aquellos Magos que llegaron de Oriente al rey fue el detonante del espectáculo dantesco que organizó la crueldad aberrante de Herodes a raíz del nacimiento de Jesús.

Habían perdido el brillo celeste que les guiaba, llegó la desorientación, no sabían por donde andaban, temieron no llegar a la meta del arduo viaje emprendido tiempo atrás y decidieron quemar el último cartucho antes de dar la vuelta a su patria entre el ridículo y el fracaso.

Al rey le produjo extrañeza la visita y terror la ansiosa pregunta sobre el lugar del nacimiento del Mesías; rápidamente ha hecho sus cálculos y llegado a la conclusión de que está en peligro su status porque lo que las profecías antiguas presentaban en futuro parece que ya es presente realidad. Se armó un buen revuelo en palacio, convocaron a reunión a los más sabios con la esperanza de que se pronunciaran y dieran dictamen sobre el escondrijo del niño "libertador". El plan será utilizar a los visitantes extranjeros como señuelo para encontrarle. Menos mal que volvieron a su tierra por otro camino, después que adoraron al Salvador. Impaciente contó Herodes los días; se irritó consigo mismo por su estupidez; los emisarios que repartió por el país no dan noticia de aquellos personajes que parecen esfumados, y se confirma su ausencia. Vienen los cálculos del tiempo, y contando con un margen de seguridad, le salen dos años con el redondeo.

Los niños que no sobrepasen dos años en toda la comarca morirán. Hay que durar en el poder. El baño de sangre es un simple asunto administrativo, aunque cuando pase un tiempo falten hombres para la siembra, sean escasos los brazos para segar y no haya novios para las muchachas casaderas; hoy sólo será un dolor pasajero para las familias sin nombre, sin fuerza, sin armas y sin voz. Unas víctimas ya habían iniciado sus correteos, y balbuceaban las primeras palabras; otras colgaban todavía del pecho de sus madres. Pero para Herodes era el precio de su tranquilidad.

Son los Santos Inocentes. Están creciendo para Dios en su madurez eterna. Ni siquiera tuvieron tiempo de ser tentados para exhibir méritos, pero no tocan a menos. Están agarrados a la mano que abre la gloria. Aplicados los méritos de Cristo sin que fuera preciso crecer para pedir el bautismo de sangre, como tantos laudablemente hoy son bautizados en la fe de la Iglesia con agua sin cubrir expediente personal. El Bautismo es gracia.

Entraron en el ámbito de Cristo inconscientes, sin saberlo ni pretenderlo; como cada vez que por odio a Dios, a la fe, hay revueltas, matanzas y guerras; en esas circunstancias surgen mártires involuntarios, que aún sin saberlo, mueren revestidos y purificados por la sangre de Cristo, haciéndose compañeros suyos en el martirio; y no se les negará el premio sólo porque ellos mismo, uno a uno, no pudieran pedirlo. En este caso es el sagrado azar providente de caer por causa de Cristo, porque la mejor gloria que el hombre puede dar a Dios es muriendo.

Ya el mismo Jeremías dejó dicho y escrito que "de la boca de los que no saben hablar sacaste alabanza".

Hoy los mayores también hacen bromas en recuerdo del modo de ser juguetón y alegre de aquellos bebés que no tuvieron tiempo de hacerlas; es buena ocasión de hacer agradable la vida a los demás, con admiración y sorpresa, en desagravio del mal que provocó el egoísmo de aquel que tanto se fijó en lo suyo que aplastó a los demás.

¿Quieres saber más? Consulta ewtn

Evangelio de la Festividad de Los Santos Inocentes, mártires

Día litúrgico: 28 de Diciembre: Los Santos Inocentes, mártires


Texto del Evangelio (Mt 2,13-18): Después que los magos se retiraron, el Ángel del Señor se apareció en sueños a José y le dijo: «Levántate, toma contigo al Niño y a su madre y huye a Egipto; y estate allí hasta que yo te diga. Porque Herodes va a buscar al Niño para matarle». Él se levantó, tomó de noche al Niño y a su madre, y se retiró a Egipto; y estuvo allí hasta la muerte de Herodes; para que se cumpliera el oráculo del Señor por medio del profeta: «De Egipto llamé a mi hijo».

Entonces Herodes, al ver que había sido burlado por los magos, se enfureció terriblemente y envió a matar a todos los niños de Belén y de toda su comarca, de dos años para abajo, según el tiempo que había precisado por los magos. Entonces se cumplió el oráculo del profeta Jeremías: «Un clamor se ha oído en Ramá, mucho llanto y lamento: es Raquel que llora a sus hijos, y no quiere consolarse, porque ya no existen».

Comentario: Rev. D. Joan Pere PULIDO i Gutiérrez (El Papiol, Barcelona, España).

«Se levantó, tomó de noche al Niño y a su madre, y se retiró a Egipto»

Hoy celebramos la fiesta de los Santos Inocentes, mártires. Metidos en las celebraciones de Navidad, no podemos ignorar el mensaje que la liturgia nos quiere transmitir para definir, todavía más, la Buena Nueva del nacimiento de Jesús, con dos acentos bien claros. En primer lugar, la predisposición de san José en el designio salvador de Dios, aceptando su voluntad. Y, a la vez, el mal, la injusticia que frecuentemente encontramos en nuestra vida, concretado en este caso en la muerte martirial de los niños Inocentes. Todo ello nos pide una actitud y una respuesta personal y social.

San José nos ofrece un testimonio bien claro de respuesta decidida ante la llamada de Dios. En él nos sentimos identificados cuando hemos de tomar decisiones en los momentos difíciles de nuestra vida y desde nuestra fe: «Se levantó, tomó de noche al Niño y a su madre, y se retiró a Egipto» (Mt 2,14).

Nuestra fe en Dios implica a nuestra vida. Hace que nos levantemos, es decir, nos hace estar atentos a las cosas que pasan a nuestro alrededor, porque —frecuentemente— es el lugar donde Dios habla. Nos hace tomar al Niño con su madre, es decir, Dios se nos hace cercano, compañero de camino, reforzando nuestra fe, esperanza y caridad. Y nos hace salir de noche hacia Egipto, es decir, nos invita a no tener miedo ante nuestra propia vida, que con frecuencia se llena de noches difíciles de iluminar.

Estos niños mártires, hoy, también tienen nombres concretos en niños, jóvenes, parejas, personas mayores, inmigrantes, enfermos... que piden la respuesta de nuestra caridad. Así nos lo decía Juan Pablo II: «En efecto, son muchas en nuestro tiempo las necesidades que interpelan a la sensibilidad cristiana. Es la hora de una nueva imaginación de la caridad, que se despliegue no sólo en la eficacia de las ayudas prestadas, sino también en la capacidad de hacernos cercanos y solidarios con el que sufre».

Que la luz nueva, clara y fuerte de Dios hecho Niño llene nuestras vidas y consolide nuestra fe, nuestra esperanza y nuestra caridad.

martes, 27 de diciembre de 2011

VII Encuentro Mundial de las Familias [Milán, Italia]

Catequesis preparatorias
para el VII Encuentro Mundial de las Familias

(Milán, 30 de mayo al 3 de junio de 2012)


Índice de las catequesis

  1. El secreto de Nazaret

  1. La familia engendra la vida
  2. La familia vive la prueba
  3. La familia anima la sociedad

  1. El trabajo y la fiesta en la familia
  2. El trabajo recurso para la familia
  3. El trabajo desafío para la familia

  1. La fiesta tiempo para la familia
  2. La fiesta tiempo para el Señor
  3. La fiesta tiempo para la comunidad

Tema de las Catequesis
Familia, trabajo, fiesta. Son las tres palabras del tema para el VII Encuentro mundial de las Familias. Forman un trinomio que parte de la familia para abrirla al mundo: el trabajo y la fiesta son modalidades a través de las cuales la familia habita el «espacio» social y vive el «tiempo» humano. El tema relaciona la pareja de hombre y mujer con sus estilos de vida: el modo de vivir las relaciones (la familia), de habitar el mundo (trabajo) y de humanizar el tiempo (fiesta).

Las catequesis están articuladas en tres grupos, que en secuencia conciernen a la familia, al trabajo y a la fiesta, introducidos por una catequesis sobre el estilo de la vida familiar. Quieren iluminar el nexo entre la experiencia de la familia y la vida cotidiana en la sociedad y en el mundo.

Orar con intensidad a Dios para detener las manos de los violentos…

… que siembran muerte y tiñen la tierra de Nigeria de sangre inocente.

26-12-2011 Radio Vaticana

Lunes, 26 dic (RV).- BenedictoXVI ha pedido orar con intensidad a Dios para “que se detengan las manos de los violentos que siembran muerte y para que en el mundo puedan reinar la justicia y la paz”. Tras los cinco atentados contra templos cristianos en Nigeria en los que al menos han muerto 39 personas el Santo Padre ha lamentado que “nuestra tierra continúa siendo teñida de sangre.

El Papa recibió con profunda tristeza la noticia de estos atentados en Nigeria contra iglesias cristianas mientras que se celebraban las misas de Navidad, que han vuelto a provocar también este año luto y dolor. Además de asegurar su afecto y cercanía a la comunidad cristiana y a todos los afectados por este absurdo, el Santo Padre hace un llamamiento a los componentes de la sociedad para que reencuentren la seguridad y serenidad.

Benedicto XVI ha repetido de nuevo que la violencia es un camino que sólo conduce al dolor, a la destrucción y a la muerte; el respeto, la reconciliación y el amor son el camino para alcanzar la paz.

Llamamiento completo
La Santa Navidad nos induce a una oración más intensa a Dios para que se detengan las manos de los violentos que siembran muerte y para que en el mundo puedan reinar la justicia y la paz. Pero nuestra tierra continúa siendo teñida de sangre inocente. He recibido con profunda tristeza la noticia de los atentados que, también este año el día del nacimiento de Jesús, han provocado luto y dolor en algunas iglesias de Nigeria.

Deseo manifestar mi sincera y afectuosa cercanía a la comunidad cristiana y a todos los afectados por este absurdo gesto e invito a rezar al Señor por las numerosas víctimas. Hago un llamamiento para que, con la participación de las distintas componentes sociales, se reencuentre la seguridad y serenidad.

En este momento quiero repetir una vez más con intensidad: la violencia es un camino que sólo conduce al dolor, a la destrucción y a la muerte; el respeto, la reconciliación y el amor son el camino para alcanzar la paz.