Mons. Reinaldo Nann

lunes, 14 de octubre de 2019

XIV Encuentro Prelaticio de Jóvenes, “Donde tú vayas, yo iré”

Jóvenes de la Prelatura de Caravelí en el frontis de la Catedral

El largo viaje de regreso hacia Puquio es un solo de cantos y mucha algarabía. Tanto las canciones antiguas como las nuevas composiciones del misionero Gustavo Llerena, ahora en los labios y voces de mis jóvenes del grupo parroquial, me hacen reconocer que en estos días del XIV Encuentro Prelaticio de Jóvenes en Caravelí, con el lema “Donde Tú vayas, yo iré”, hemos vivido experiencias sumamente bellas y gratificantes, y que por ello podemos decir que “el Señor ha estado grande con nosotros y estamos alegres” (Salmo 125).

Cada encuentro de jóvenes nos trae nuevos motivos para expresar nuestra profunda gratitud a Dios. En este año, tan solo los jóvenes asistentes bordearon los 400. En todos los años que llevo en la Prelatura de Caravelí es la primera vez que recibimos a una delegación de la parroquia de Incuyo, y vino acompañada de su párroco, el P. Adán Falcón. Así como él, otros párrocos también hemos priorizado este fin de semana la atención preferencial a nuestros jóvenes: el P. Ángel Huaracha (de Cora Cora), el P. José Miguel Condori (de Lucanas), el suscrito (de Puquio) y nuestro párroco anfitrión, el P. Renzo Saldaña (de Caravelí). Así mismo la participación activa de algunas  religiosas que trabajan en la Prelatura.
Con mucho beneplácito debo resaltar que en estos dos últimos años muchas otras cosas buenas vienen sucediendo en nuestros encuentros: la participación de nuevas delegaciones, la presencia de principio a fin de nuestro obispo, la renovación y consolidación de espacios que se habían ido descuidando como la Expo Vocacional y la Noche Cultural, una cada vez más esmerada organización y, sobre todo, una mayor identificación de nuestra juventud con la Prelatura de Caravelí, a la cual se sienten dichosos de pertenecer.
Creemos que los jóvenes a los que el Señor nos llama a atender y acompañar son mucho más que un “lugar” teológico. Son, más bien, una amplia realidad que nos demanda un urgente reenfoque de nuestras prioridades pastorales. El último Sínodo de los Jóvenes ya nos venía impulsando a repensar nuestros esquemas y “formas” pastorales. Es por ello que, para sorpresa de propios y extraños, la Parroquia “San Ildefonso” de Pullo, dirigida por las madres “Misioneras de Jesús Verbo y Víctima”, ha decidido asumir por vez primera la delicada responsabilidad de organizar el próximo Encuentro Juvenil Prelaticio, el número XV, para el año 2020. Desde ya, ponemos en el Corazón de Jesús este generoso propósito, al mismo tiempo que comprometemos nuestras capacidades y deseos de seguir trabajando cada vez más unidos en favor de nuestros queridos jóvenes, tan amados por Jesús y por María. 

Pbro. Efrén Alcántara Rojas
Asesor de la Pastoral Juvenil







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