05-02-2014
Los expertos del Comité ONU de los Derechos del Niño han analizado las políticas del Vaticano contra los abusos sexuales. El resultado es un duro informe que pide medidas más claras a la Santa Sede. Sin embargo, pierde fuerza porque incluye reclamaciones exageradas como que acepte el aborto o cambie su enseñanza sobre la homosexualidad.
Hay otros ejemplos, como este párrafo: al comité le preocupa que a pesar de su influencia en las familias católicas, la Santa Sede no haya adoptado todavía una estrategia global contra el abuso en las familias.
En cuanto a los abusos, el informe del comité de expertos de la ONU cita casos terribles ya conocidos y afrontados, que llevaron a Juan Pablo II y a Benedicto XVI a reforzar la legislación.
En un comunicado oficial, la Santa Sede responde que toma nota de las observaciones, pero "lamenta ver que en algunos puntos intenta interferir en las enseñanzas de la Iglesia sobre la dignidad de la persona y sobre el ejercicio de la libertad religiosa”.
Por su parte, Francisco lanzó en diciembre una comisión vaticana que se encargará de prevenir y afrontar los abusos sexuales cometidos por sacerdotes y a trabajar con las autoridades civiles para perseguir a los culpables.
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