22 de abril, 2013 (romereports.com) La ceremonia de ordenación de sacerdotes es larga y muy emocionante y el momento del abrazo entre los nuevos sacerdotes y su obispo es inolvidable. Esta era la primera del Papa Francisco. Fue en la basílica de San Pedro y el Papa la vivió con gran intensidad.
En la homilía el Papa les habló de corazón sobre la tarea que a partir de ahora tendrán por delante. Se dirigió a los 10 nuevos sacerdotes directamente, reflexionando sobre cómo debe ser su ministerio.
Papa Francisco
“Sabéis que habéis sido elegidos entre los hombres y constituidos ante ellos como mediadores de las cosas de Dios. Ejercitad con alegría y caridad sincera la obra sacerdotal de Cristo, intentando satisfacer a Dios y no a vosotros mismos. Sed pastores, no funcionarios. Sed mediadores, no intermediarios”.
El Papa explicó también el papel fundamental que jugará en sus vidas ser ministros de los sacramentos.
Papa Francisco
“Con el Bautismo, agregaréis nuevos fieles al Pueblo de Dios. Con el sacramento de la Penitencia perdonaréis los pecados en el nombre de Cristo y de la Iglesia. Y hoy os pido en el nombre de Cristo y de la Iglesia: por favor, no os canséis de ser misericordiosos. Con los santos óleos llevaréis alivio a los enfermos y los ancianos: no sintáis vergüenza de llevar cariño a los ancianos”.
Los 10 nuevos sacerdotes se han preparado en tres seminarios de Roma y proceden de 4 países diferentes: seis son italianos, dos de India, uno de Croacia y uno de Argentina.
A la ceremonia acudieron las familias de los nuevos sacerdotes, un buen grupo de obispos y muchas familias que han peregrinado a Roma estos días. La basílica de San Pedro estaba llena.
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