El Arzobispo de Huancayo, Monseñor Pedro Barreto Jimeno,
SJ., agradeció a las personas e instituciones que entregaron sus donaciones
para los damnificados de Antacalla, distrito de Andamarca, provincia de
Concepción, que sufren las consecuencias de los desastres naturales.
El pueblo respondió al llamado del Arzobispo en Semana
Santa, de este año fuera de solidaridad, y en el que “a más crisis más
solidaridad”, una solidaridad que debe ser permanente.
Precisamente el Jueves Santo, se llevó la ayuda para
Antacalla, gracias al aporte y la colaboración de Defensa Civil de la provincia
de Huancayo, Cáritas, y los fieles. Fue un camión lleno de calaminas,
utensilios, colchones, alimentos y ropas que partió del Arzobispado rumbo a la
zona del desastre, donde decenas de familias lo perdieron todo.
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