Queridos hermanos y hermanas:
“El primer día de la semana, al amanecer, las mujeres fueron al sepulcro… Encontraron removida la piedra y entraron, pero no hallaron el cuerpo del Señor Jesús… Se les aparecieron dos hombres… Ellos les preguntaron ¿Por qué? ¿Buscan entre los muertos al que esta vivo? No está aquí, ha resucitado” (Lucas 24,1-4).
Lo buscan, pero no lo encuentran: ya no está donde había sido sepultado. De aquello solo quedan las señales; la tumba vacía, vendas, sabanas… La noticia es desconcertante:” No está aquí. Ha resucitado”Noticia que resuena de generación en generación; anuncio de hace mas de dos mil años y siempre nuevo. Anuncio que en estos días se esta difundiendo, una vez mas, en toda la tierra. ¡Queremos que también resuene en toda nuestra prelatura de Caravelí!
Si Cristo hubiera quedado prisionero del sepulcro, la vida de los hombres y mujeres de este mundo no tendría sentido. Con su Resurrección se cumple las Escrituras. Lo viejo se renueva, lo antiguo da lugar a lo nuevo. Es un nuevo comienzo de la historia, porque Cristo ha resucitado, primicia de todos los que han muerto” (1 Co 15,20) .Se cumple las promesas de los Profetas:”les infundiré mi espíritu y haré que caminen” (Ezequiel 6,4).
Nace en la Pascua el nuevo Pueblo con el que Dios ha sellado una Alianza eterna en la Sangre de Cristo, crucificado y resucitado. De este Pueblo formamos parte mediante el Bautismo. Por este Sacramento nos incorporamos a El y a su familia la iglesia. Nos recuerda el apóstol San Pablo” así como Cristo fue despertado de entre los muertos por la gloria del Padre, así también nosotros andemos en una vida nueva” (Rm 6,4).
Haré que caminen… andemos en una vida nueva! Con nuestra mirada centrada en el señor y nuestras manos muy comprometidas para construir un mundo Nuevo. Nos alegra y anima ver como crecen los testimonios de hombres y mujeres que caminan siguiendo al resucitado y tratan de construir el mundo desde lo sencillo de todos los días. Al mismo tiempo nos desafían a buscar caminos de respuestas el crecimiento de las señales de una cultura de muerte que no tiene en cuanta los valores que el Maestro nos enseño.
Siendo testigos de la Resurrección queremos construir el Mundo según el Evangelio. Cuanto más fuerte sean los vínculos con el señor Jesús, es claro que crece la sintonía y el discipulado se capacita, en el ámbito de la Iglesia, para vivir y actuar en coherencia con el Maestro. Esta es la fuente de un compromiso al que invito a todos los cristianos de nuestra Prelatura de Caravelí.
Que Maria haga cada vez mas viva nuestra fe en la Resurrección del Señor y nos guié en nuestro compromiso de testimoniar el mensaje gozoso y fundamental de la Pascua a nuestras familias y vecinos, habitantes de nuestra Prelatura.
Con mis mejores deseos, ¡FELICES PASCUAS!
Obispo de la Prelatura de Caravelí